julio 24, 2025
La moda siempre evolucionó rápidamente, pero últimamente, el cambio no proviene de los ciclos de tendencias, sino de la tecnología. Las fuerzas clave están remodelando la forma en que las personas compran, gastan y piensan sobre la propiedad, desde las criptomonedas hasta la inteligencia artificial y la procedencia. Juntos, están empujando a la industria hacia un futuro en el que los pagos digitales, los bienes autenticados y el comercio de segunda mano no son solo complementos, sino fundamentales para la experiencia.
La criptomoneda se está abriendo camino en la corriente principal de la moda. Desde casas de moda patrimoniales hasta nuevas compañías que priorizan la cultura, las marcas están aprovechando las criptomonedas para simplificar las transacciones globales y satisfacer la creciente demanda de pagos nativos digitales. Para los compradores más jóvenes, las criptomonedas encajan perfectamente en sus expectativas de conveniencia, transparencia e innovación.
Pero el cambio no se trata solo de pagar. La tecnología blockchain está permitiendo nuevos modelos de participación, incluidas las recompensas basadas en tokens que actúan más como moneda digital que como puntos de lealtad tradicionales. Algunas marcas incluso están convirtiendo esos tokens en claves de acceso para lanzamientos limitados, acceso anticipado o beneficios comunitarios. ¿El resultado? Una experiencia de compra que se siente más como un juego que como una transacción.
Ahí es también donde entran en juego los pagos agentes. El nuevo Agent Pay de Mastercard es una señal temprana de cómo la IA podría remodelar no solo lo que compramos, sino también cómo lo compramos. La idea es simple: los agentes inteligentes actúan como su asistente de compras de IA y pueden navegar, recomendar y completar compras en nombre de un comprador, empleando credenciales seguras y tokenizadas. En lugar de saltar entre aplicaciones o páginas de pago, los usuarios pueden interactuar de manera conversacional y dejar que el agente se encargue de la logística, ya sea comprar un atuendo de cumpleaños o, para los comerciantes, obtener materiales a través de las fronteras.
Es un vistazo a un futuro donde los pagos están integrados en las experiencias —siguen siendo seguros y autenticados, pero ocurren en segundo plano, como parte de la interfaz.
En un camino diferente pero complementario, el mercado de reventa está experimentando su propia revolución impulsada por la tecnología. La moda de segunda mano, antes relegada a sitios web especializados e interfaces engorrosas, es ahora un sector global de 256 mil millones de dólares que se prevé alcance la asombrosa cifra de 367 mil millones de dólares para 2029. De hecho, la reventa de artículos de lujo representó el 27% del gasto en ropa en línea en 2024, mientras que la reventa en el mercado masivo ascendió al 5,4% en 2025, según el Instituto de Economía de Mastercard.
Ese crecimiento está impulsado por el ahorro de costos y los beneficios ambientales, y está siendo posible gracias a la innovación. Las nuevas herramientas están suavizando los puntos de fricción que alguna vez plagaron la reventa: listados complicados, precios inconsistentes y preocupaciones sobre la autenticidad.
Los pasaportes digitales de productos, por ejemplo, permiten a las marcas incrustar datos en las prendas, por lo que los futuros listados de reventa se pueden generar instantáneamente, sin necesidad de que los vendedores ingresen manualmente etiquetas o descripciones. La línea Coachtopia de Coach ahora incluye esta función, lo que agiliza la reventa con listados con un solo clic y preserva la supervisión de la marca de la segunda vida de sus productos.
Mientras tanto, la IA se emplea para generar descripciones de productos, recortar fotos y hacer coincidir a los usuarios con listados relevantes, todo en segundos. Plataformas como Poshmark y ThredUp están introduciendo herramientas de búsqueda visual y buscadores de estilo basados en chat que se sienten más como hablar con un amigo que navegar por un estante digital.
Y para que la reventa llegue a la adopción masiva, la tecnología debe sentir invisible. Ahí es donde entran en juego nuevas herramientas como Future Reference y Gem . Estas plataformas extraen el historial de compras, automatizan los listados y agregan precios en docenas de sitios de reventa y venta minorista, minimizando los clics y maximizando el valor.
Juntos, estos avances apuntan a un cambio más profundo: un replanteamiento de lo que significa "poseer" la moda. El consumidor de hoy puede comprar un vestido, usarlo en el mundo real, venderlo a través de una aplicación asistida por IA y retener un certificado digital que vive en su billetera criptográfica. Esa misma billetera podría tener acceso exclusivo a nuevas colecciones, recompensas gamificadas o beneficios comunitarios basados en NFT.
Incluso las billeteras en sí mismas se están convirtiendo en declaraciones de moda, algo así como una flexión digital. Algunas marcas de lujo están experimentando con monederos de criptomonedas personalizados y dispositivos portátiles NFT, haciendo que las herramientas de blockchain no solo sean funcionales, sino también aspiracionales.
La fusión de las criptomonedas, la reventa y la IA no solo está modernizando la moda, sino que está dando a los consumidores más poder sobre sus clósets. Ya sea que estén ganando recompensas simbólicas, chateando con un agente de compras de IA o enumerando automáticamente compras pasadas, los compradores de hoy están construyendo una economía de la moda más conectada, personalizada y circular.